REFORMA HIDROCARBURÍFERA
Gestión Integral de los Aceites Lubricantes Usados
La relación entre medio ambiente y desarrollo se centra en el concepto de “desarrollo sostenible”, la sostenibilidad del sistema global del que el sistema es parte. Si la actual escala de la actividad económica crea problemas de equilibrio para la estabilidad de la biosfera, continuar aumentando el crecimiento económico en las condiciones en las que se ha venido desarrollando, puede sin duda suponer mayores costos incrementales que se reflejen en un crecimiento antieconómico; es decir, un modelo que en vez de enriquecer empobrece, si en el cómputo de pérdidas y ganancias incorporamos el capital natural afectado. (Flores, 2001)
Es evidente que el crecimiento económico incontrolado no puede ser una definición sostenible en el tiempo. Un crecimiento material indefinido es imposible dentro de un sistema ambiental finito. En su lugar debemos proporcionar un desarrollo sostenible, en vez de un crecimiento descontrolado de la producción. Una nueva idea de desarrollo que implique cambios cualitativos, transformaciones estructurales dirigidas a mejorar el bienestar social y que pretenda, además, que los bienes y servicios de la biosfera mantengan su capacidad de sostener en el futuro todas las formas de vida y el desarrollo integral de las personas. (Depuroil, 2022)
En este ambiente de variabilidad creciente del “cuidado del medio ambiente” y “mejora de la calidad de vida”, nace la necesidad de minimizar la generación de residuos producidos por la contaminación de aceites usados, evitando así los riesgos medioambientales que esos residuos pueden generar.